Por: Ayelen Muzzio
En Argentina hace 36
años las Fuerzas Armadas, en una alianza con los empresarios más ricos y con
complicidad de algunos sectores de la iglesia, daban el golpe de estado que
iniciaba la etapa más horrorosa de la historia del país. El resultado de esta
alianza deja un aparato organizado para torturar, violar, matar y desaparecer
personas.
Por el aire resuenan los ecos de
esas voces que aclaman por dejar el pasado atrás o aquellas que decían “con los
militares estábamos mejor”. Pero yo me pregunto, ¿será posible vivir en un lugar
donde el pasado sea el olvido? ¿Qué somos? ¿De donde venimos? Estas son
preguntas que quedarían sin respuesta de no ser por los reclamos de familias
destruidas por ese “gobierno” con 30.000 hombres y mujeres que no están.
Esos ecos, que aclaman por guardar
el pasado bajo candado, pensarán que lo mejor es mirar hacia delante. Pero no
se puede saber por donde ir si no sabes por donde venís. Hoy miramos atrás
y nos reconocemos en la lucha de las
madres que nos enseñan a no bajar los brazos, a mostrarles al mundo lo que es
el amor y a romper toda barrera del silencio para encontrar a su sangre, a sus
hijos. Estas mujeres, que fueron golpeadas y tratadas como locas, son la
memoria viva de lo que pasó en esa época oscura.
Esa memoria viva que año a año
inicia un recorrido circular en las
plazas de nuestra historia y que levanta las banderas del “Juicio y
Castigo” realizará hoy, 24 de marzo de 2012, una marcha que recorrerá las
calles de Rosario, pasando por los Tribunales Federales y llegando a la plaza
25 de mayo. La concentración es a las 17 horas en la plaza San Martín.
Este año tiene un tinte especial,
porque el día 26 de marzo se dará a conocer la sentencia en el juicio Díaz
Bessone. Motivo por el cual los estudiantes universitarios serán desobligados a
partir de las 10 de la mañana hasta las 15, para poder asistir a la marcha en
la puerta del Tribunal Federal (Oroño al 900).
NUNCA MÁS! me gusto mucho tu nota, y sobre todo el resaltar lo de la complicidad civil y religiosa que muchas veces se olvida, memoria y verdad, y castigo a los culpables de tanto horror
ResponderEliminarGracias ema. Justicia por sobre todo y memoria para no volver a repetir lo vivido.
ResponderEliminarBesos!
Aye